miércoles, 15 de agosto de 2018

Renzo Garrido Ricoveri. El arte como arma liberadora.





El arte como arma liberadora
Texto por Renzo Garrido Ricoveri

Esta vez les raigo unas reflexiones como resultado de un conjunto de emociones que podemos transpirar en el tan oscurecido mundo del arte, aquel abstracto, -llámese obra- hace sentir tan fuera de la realidad, que todos los pensamientos, sensaciones que han sido manipulados tal cual un escultor transforma una bola de arcilla en una especie de objeto parlante, con vida, dando a conocer así, [el autor] su dominio de la realidad.  Con esto quiero decir el que hacer de la vida es arte, algo que se ha perdido a medida que pasan los años, las décadas, siglos, y en mi caso la música y la Ciencia Política se distorsionan abrumadoramente. Entonces,  pienso como mucho en que la liberación neta del hombre se da mediante el arte como bastión, como el son en nuestra galaxia, es así que el arte es el centro de todo pensamiento humano, donde todas inquietudes se encuentran y dan como resultado la búsqueda de comunicarla o expresarla.

El arte en nuestro caso (que sé que muchos dirán, es ciencia) de  las ciencias sociales es la herramienta más efectiva de estudiar una sociedad, que piensa, que siente, que observa, que escucha. Todas siendo así el resultado de nuestra alienación por parte de los sistemas hegemónicos mundiales. Pero ¿Qué paso con esto? ¿Qué esta tan mal en nuestro país, en nuestro continente? Nuestro arte está en crisis y por eso mismo nuestra cultura en lo mismo, la política, la economía, la moral, el simple precepto filosófico del  “no saber cuánto es suficiente” (consumismo, emociones, conocimiento) nos ha convertido en consumidores de nuestra propia destrucción. Entonces, por qué el arte, es la última opción pensada por todos nosotros a nivel político familiar EN NUESTRA SOCIEDAD ES LA ÚLTIMA OPCION. Simplemente es un hobbie, un pasatiempo. No se ha entendido en que la vida es arte y el accionar del hombre de su razón es arte ya que es el resultado de toda su experiencia a través de los años, en cuanto a materia económico-política en nuestro país todos somos partícipes de esta debacle, la transformamos en una forma de vivir, en una forma de subsistir; no existe el arte actualmente en nuestro país (con esto no me refiero a que no se esté creado o estén en proceso de creación de artistas en nuestro país) simplemente me refiero al hecho de que todo lo que hacemos, no tiene un fin determinado sólo subsistir. Les pongo como ejemplo lo siguiente: como músico no produces nada en materia económica, como bailarín, como escultor, como obrero…  el arte como esencia es visto como una estupidez que no sirve en nuestro país.

Nos limitamos con un rol que nos establecemos: soy politólogo y hablamos de lo mismo, la política de todos los días, un buen partido, la TV, en ella tantos sujetos maquillados, arte monetario, falaz, anuncios, más anuncios, repeticiones, arte amarillista, arte maquillado con promoción, el arte como tortura del artista, repetición que hace entrever todo lo que se ha dicho a través de los años”, patético ¿Verdad? Todo estereotipado sin esencia, sin pasión sin emoción, siendo así autómatas sin una auténtica existencia; me atrevo que en vez de hablar de animales políticos como hablaba Aristóteles, somos autómatas politiqueros, sólo repetimos lo que muchos dicen sin parar. Entonces la falta de visión -en este caso artística- como capacidad humana de trascender mental y reflexivamente -en su que hacer de día a día- nos ha hecho hombres vacios, sin emociones, sin libertad.  Limitándonos constantemente por el simple hecho de no ser indispensables, hace falta compromiso voluntad, pasión (característica que un artista tiene consigo siempre, en busca de sobrevivir a un sistema que destruye su ser y expresión.

Básicamente hasta que no entendamos que el arte es la herramienta más efectiva para el desarrollo de nuestro país, no pretendamos ser libres, ya que nuestro arte está condicionado y por ende nuestra libertad, existencia, país y como afirmo Sartre en su momento “Quién es autentico, asume la responsabilidad de ser lo que es y se reconoce libre de ser lo que es” culmino afirmando no perdamos mas nuestro tiempo seamos artistas en lo que hacemos ya que este es nuestro tiempo.


La fitoestética mirada de Sergio Garrido. Exposición pictórica. Lía Bermúdez.







Palabras de apertura por Alexis Blanco


Recital del Mtro. Laurencio Zambrano.


El clan Garrido.



Fabulario cromático. Exposición pictórica de Sergio Garrido. Galería Julio Árraga


Sergio Garrido Ricoveri, un hacedor de mundos
Texto por Francisco Ruiz.

La Galería “Julio Árraga” de la Secretaría de Cultura abrirá sus puertas este viernes 16 de junio, a la 1 de la tarde para recibir al artista plástico Sergio Garrido Ricoveri con la exposición titulada “Fabulario Cromático”, excusa para explorar en su universo y conocer un poco más el carácter de este creador desde otra perspectiva.

Acudí pues a esta cita con el arsenal de trabajo listo para iniciar lo que sería una entrevista más. Pero mi encuentro con el entrevistado se transfiguró en una tertulia entre panas, un ritual desprovisto de protocolos y terminologías inútiles, propias del argot. 

Apareció en el lugar acordado a tiempo, con una indumentaria nada formal: un suéter, jeans azules y un sombrero de paja o eso creí.

—¡Adivina de qué está hecho este sombrero! – me dijo de inmediato, luego de estrecharme la mano, lo que me hizo dudar acerca del material con el que se había confeccionado aquella prenda. En efecto, no estaba elaborada de paja sino de papel de periódicos y estaba pintada por él.

Fue un encuentro algo inusual, dentro del recinto de una biblioteca atestada de libros. Digo “inusual” pues no imaginé un escenario tal para conversar con un artista, debía ocurrir este encuentro en un museo, en una galería de arte o en un salón descomunal, bañado con luz tenue. Eso pensaba. 

Pero no era descabellada la locación de reunión porque aquellos que respiran y sufren el arte, jamás serán ajenos a los templos donde yacen los grandes creadores. Yo conocía al pintor Sergio Garrido pues me une a su madre, la tenaz periodista Yvetti Ricoveri, la misma pasión por esta profesión. Sin embargo, la imagen que tenía de él - hasta ese momento – resultó ser una deforme visión que a fuerza de superficialidad me hizo cimentar una idea errónea de su personalidad y de la naturaleza de su espíritu. 

Un tipo jovial, bohemio, que había encontrado en la pintura una forma de expresión. Algo de músico, de poeta y de loco; y hasta ahí llegaba mi vago pensamiento de quién era Garrido.

Recientemente Garrido había obtenido el primer lugar en el concurso IN SITU, certamen celebrado en el marco del Día Nacional del Artista Plástico , organizado por La Facultad Experimental de Artes de la Universidad del Zulia (FEDA), resultando ganadora su obra “Unión” entre más de 120 trabajos realizados por estudiantes de todas las escuelas de arte de la región.

Estudiante del 7mo semestre de Artes Plásticas en la FEDA y con 26 años de edad, Sergio Garrido Ricoveri es considerado un artista integral por la crítica, un visitante de dimensiones fantásticas que conforman el vasto universo de su imaginación y que luego le hacen crear mundos a partir de experiencias quizá cotidianas para el colectivo, como el contacto con las personas, la naturaleza, a través del lago, una planta, un viaje a la Sierra de Perijá, o el nacimiento de una melodía desde el respirar de su flauta. 

Ahora la Galería “Julio Árraga” le esperaría con su exposición “Fabulario Cromático”, donde expondrá más de 50 obras de diversos formatos, y técnicas incluida la obra laureada “Unión”, sumándose este espacio a la lista de escenarios donde su obra ha sido expuesta, tales como la Escuela Superior de Arte “Neptalí Rincón” de la Secretaría de Cultura, el Centro de Arte de Maracaibo “Lía Bermúdez” (CAMLB), La Sala Baja del Teatro Baralt, la Universidad Católica Cecilio Acosta (UNICA), La Universidad Rafael Urdaneta y La Universidad Rafael María Baralt, entre otras. 

—¿De qué hablamos? – me preguntó. 
—De lo que usted quiera; ¿Artista desde niño?
—Viví mi infancia en talleres de arte. Mi mamá me llevaba a actividades culturales, prácticamente mi segunda casa fue la Escuela Superior de Artes “Neptalí Rincón”. Allí crecí, veía clases de dibujo, de grabado, de cerámica, tallados en madera, en piedra, todo ese conocimiento forjó en mí la necesidad de crear y así aprendí el oficio. También tuve simpatía por el mundo de las artes escénicas, ese misticismo me permitió desarrollar la sensibilidad artística, dramatizaba mis personajes y los plasmaba sobre tela o papel.

—¿Cómo te acercas al mundo del arte? Cómo fue la influencia de tus padres en este camino creativo y en que te inspiras?
—Mi papá (sonríe) es un guerrero, vivió cosas muy duras, pero eso no lo desanimó en el camino. Es un intelectual, un investigador rigurosamente disciplinado y de quien aprendí muchas herramientas las cuales apliqué luego en la plástica. Mi mamá es una soñadora, un ángel que cayó del cielo, ella me ha apoyado mucho, me incentiva cada día, mis lienzos llevan su sello; es una persona que es capaz de poetizar mi trabajo, mi principal crítica de arte.
Algunas imágenes salen a la superficie cuando piensa en quienes le han inspirado, como el pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín, al cual reconoce como un artista trascendente. Guayasamín es una inspiración para mí por el legado significativo que dejo a su país, construyendo un museo para que la gente tuviera acceso al arte. Vincent Van Gogh de algún modo es otra referencia.

—Ahora que mencionas a Van Gogh y a Guayasamín ¿Jamás has soñado con ser recordado en la historia?
—El reconocimiento lo hace el camino transitado, pero no sueño con la fama ni con ser una celebridad, aunque entre el artista y le celebridad hay un abismo que los separa. Me gusta más compartir con la gente, haciendo lo que me gusta.

—Se dice que el artista concibe su oficio en solitario, pero a Sergio Garrido siempre le rodea mucha gente ¿Cómo es posible esto?
—Siento simpatía por la soledad, aunque me gusta estar con mis amigos, disfruto pintar con quienes comparten esta misma pasión conmigo. Me llevo bien con ambas cosas pues desde ambos estados, solo o acompañado, puedo absorber herramientas para construir mundos que primero sueño y luego materializo. Soy un hacedor de mundos, un aventurero hasta los tuétanos. 

Amante de la obra de Julio Cortázar y Edgar Allan Poe, personaje para quien “lo esencial es mantenerse bailando, pintando, mirando en clave del más agudo sentido del humor”, referencia que hizo el legendario Alexis Blanco sobre Garrido y que deja inutilizada cualquier otra intención de definición. 

Maracaibo, 2017


Sergio Garrido


 Palabras de Jerséi Lucazchevski.


Palabras de inauguración de Sergio Garrido.






Sergio Garrido y el mtro. Humberto González



Sergio Garrido y Ender Colina.






Sergio Garrido con el poeta Fabio Garrido.



 Sergio Garrido con el mtro. Luis Cuevas, Humberto González y Francisco Xaverius.