RECORRIDO HISTÓRICO DE LA GESTIÓN DE LAS
POLÍTICAS PUBLICAS DE LA
PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES Y TRABAJADORAS EN LAS
EMPRESAS PÚBLICAS DEL MUNICIPIO MARACAIBO DEL ESTADO
ZULIA. (1959 A 1998).
1.-
El problema:
Esta investigación
pretende explicar críticamente la gestión de las políticas de participación de los trabajadores y las
trabajadoras en las empresas públicas del municipio Maracaibo del Estado Zulia
en el periodo que va desde 1958 hasta 2012.
El nacimiento del
modelo económico venezolano capitalista moderno, asociado a la renta petrolera,
implico todo un proceso de nacimiento y consolidación de empresas públicas en
aquellas áreas estratégicas, que por su naturaleza en alta tasa de inversión
fueron de escasa atracción para el sector privado, aunado que en dicho proceso
se daba la prerrogativa al Estado de orientar la economía de las demandas
internas y externas del sistema-mundo-capitalista.
El proceso desde
construcción de las Empresas públicas no ha sido lineal, se encuentran
determinadas por el modelo económico
implementado y por el grado de respaldo o no por parte de las Elites políticas
en el poder. Es ese sentido, se ha producido una periodización construida a
partir quiebres paradigmáticos vinculados a la implementación de los modelos
económicos: El modelo de sustitución de importaciones con una pujante
industrialización denominado desarrollismo, la aplicación del modelo neoliberal
y finalmente la experiencia en curso, caracterizada por el planteo de una economía
socialista.
Este proceso ubicado
en una perspectiva reformadora socialdemócrata, el tema de la participación de
los trabajadores y las trabajadoras en las empresas públicas
constituyen un factor
fundamental que da cuenta de la naturaleza del sistema de conciliación de
intereses de clase, con la cual se inauguro la democracia representativa, cuyo
fundamento material deviene de la renta petrolera.
En el campo de las
ciencias sociales venezolanas, los grandes estudios que se han realizado han
centrado su atención al abordaje del movimiento sindical aisladamente como
maquinas petitorias de reivindicaciones socioeconómica de los trabajadores y
trabajadoras en el contexto del proceso de acumulación capitalista, por tanto
una visión integrada de la relación de los trabajadores y tragadoras en las
empresas publicas son escasa, cuando se articula a los proceso de toma de
decisiones, organización y comunicación en estas empresas del Estado.
Por tanto, dado el
proceso de transformación estructural que discurre en sus contradicciones,
donde el tema de la participación de los trabajadores y trabajadoras son parte
de los postulados de la filosofía constitucional bolivariana y punto de la
lanza del proceso de democratización de la propiedad de los medios de producción
en un modelo de desarrollo endógeno socialista, la compresión de ese fenómeno
pudiera dar cuenta para mejorar sustancialmente las políticas de esa
naturaleza, elevar el desempeño de los aparatosos del Estado relacionados a la
producción de bienes y servicios para darle repuesta al encargado de la
sociedad, constituye un nudo critico de no solo de los científicos sino que
también de los operadores políticos y del naciente poder popular en
construcción.
La compresión de
dicho proceso, constituyen una necesidad dado el curso histórico que vive el
país en la actualidad y un desafió responsable para los científicos sociales involucrados con la transformación
estructural que ocurre, para que una vez visualizado el desarrollo se conciba
un marco teórico y practico para la explicación critica de dicho fenómeno de
gestión.
2.- Justificación:
Desde el punto de
vista epistémico el abordaje de la gestión de las políticas de participación de
los trabajadores y trabajadoras en las empresas publicas, se justifica en el
siguiente sentido:
Desde el punto de vista teórico, la gestión de
la participación de los trabajadores y trabajadores en las empresas publicas,
constituye un viejo tema en el marxismo duro, sobre todo en el proceso de la Revolución de Octubre
con la figura de los Soviet, en Europa alcanza importancia a través de los
Consejos de fabrica. En el caso Venezolano, dada la raíz del modelo político de
conciliación de intereses de clase, instruido por el modelo de democracia
representativa a partir de 1958, la participación de los trabajadores y las
trabajadores en el gobierno de las empresas publicas ha sido un aspecto
periférico, de escasa motivación para los estudiosos de las ciencias sociales.
El quiebre histórico de los paradigmas económicos y políticos, el tema de la gestión de la política de
participación alcanza esencialmente importancia, ya que la Constitución
Boliviana de Venezuela, estable como fundamento el Estado de
derecho y de justicia social, que aunado a los principio de participación y
corresponsabilidad abren una importante fisura dentro del nuevo modelo de
desarrollo endógeno socialista. A demás la nueva Ley Orgánico incorpora la
figura de los Consejos de los trabajadores y abre las puertas para reglamentar
estrategias de participación como el control obrero, la auto-gestión y la
cogestión, fundamento de la democracia socialista en las empresas públicas.
Por tanto se plantea
la necesidad de un esfuerzo desde la teoría crítica que de cuenta de ese
proceso experencial vivido el devenir histórico de gestación de los
trabajadores y las trabajadoras, política de participación que busca
significación, para dar cuenta de la realidad que discurre, en un mundo carente
de referentes teóricos explicativo de la necesidad de la transformación no solo
de las practicas del movimiento sindical sino de las figuras organizativas
emergente en el contexto de la radicalización la cambio estructural que sucede
en el medio de un sistema-mundo-capitalista periférico, instituido en sus
dimensiones objetivas y subjetivas.
Desde el
punto de vista metodológico, también
se requiere un esfuerzo sostenido desde las ciencias sociales para la
elaboración de referentes metodológicos que
eleve y mejore la participación de los trabajadores y las trabajadoras de las
empresas publica, que tribute a
resolución al encargo de la sociedad para el elevar la calidad de la gestión en
lo publico y la acción política para la
democracia popular en las empresas publicas y el buen vivir como marco
fundamental a un país que construye una ruta histórica en la democracia participativa
y protagónica.
Desde el punto de vista social, el proceso de re-planteo de las políticas de
partición de los trabajadores y los trabajadores, permitirá dar un salto
cualitativo en la transformación en las formulación y ejecución de las
políticas publicas y del modo de producción instruido desde 1958 por acuerdo de
las elites económicas y políticas en el poder para abrir paso a un proceso de
participación que descentralice y desconcentre el poder para ampliar las
oportunidades y las condiciones en un contexto de justicia social, equidad e
inclusión.
Proceso de
transformación que tiene como actor socio-político fundamental a los
trabajadores y las trabajadoras en un momento de desarrollo del modelo
capitalista, y que dado la inserción de Venezuela en el sistema
mundo-capitalista, el proceso de transformación requiere el acompañamiento de
ese sector vinculado a la producción, distribución y consumo de los bienes y
servicios necesarios para la vida en sociedad, cuando se produce una gran
iniciativa nacional para transformar el viejo modelo productivo sustentado en
las relaciones sociales de producción capitalista por un sistema económico
socialista destinado a satisfacer las necesidades de la sociedad en crecimiento
y complejidad.
Desde el
punto de vista practico, dotar al
ejercicio de la participación de los trabadores y trabajadoras de las empresas
publica permite configurar una nueva racionalidad no instrumentista
(des-racionalizar lo racionalizado por el capital y des-sujetar al sujeto del
tiempo del capital rescatando como fundamento del cambio metabólico de las
relaciones sociales de producción capitalista), comprendida como un tipo de
relación social en un contexto de transformación estructural socialista dentro
de ética colectiva que centralice lo humano para hacer frente a los dilemas y
los grandes retos históricos.
3.- Objetivo general y Objetivos específicos:
3.1.- Objetivo general: Explicar la gestión de las políticas de
participación de los trabajadores y trabajadoras en las empresas públicas del
municipio Maracaibo del estado Zulia. (1999-2012).
3.2.- Objetivos
específicos:
3.2.1.- Caracterizar el proceso de formulación de las
políticas de participación de los trabajadores y trabajadoras en las empresas
públicas del municipio Maracaibo del estado Zulia. (1999-2012).
3.2.2.-Caracterizar las políticas formales de
participación de los trabajadores y trabajadoras en las empresas publicas.
.3.2.3.- Examinar la política real de participación
de los trabajadores y trabajadoras en las empresas públicas.
3.2.4.- Caracterizar los modelos de gestión de las
políticas de participación de los trabajadores y trabajadoras en las empresas
públicas.
3.2.5.- Elaborar una propuestas transformadora para
la gestión de las políticas de los trabajadores y trabajadoras en las empresas
públicas en un contexto socialista.
4.- RECORRIDO
HISTORICO DEL OBJETO:
4.1.- EL
CAPITALISMO RENTISTA PETROLERO VENEZOLANO COMO REFLEJO DEL SISTEMA-MUNDO
CAPITALISTA:
El desarrollo de la formación histórica del
capitalismo venezolano se encuentra vinculado a dos procesos estructurales
simultáneo que permitieron la configuración de la sociedad moderna de cara a un
sistema-mundo-capitalista internacional.
Según Wallerstein (1984) el sistema-mundo-capitalista
al contrario de los otros sistema-mundo, ha logrado totalizar y racionalizar
las relaciones sociales modelada por las estructuras económicas instituidas. La
explicación que arguye el autor, es que “Es
una entidad económica pero no política, al contrario de los imperios, las
ciudades-Estado y las naciones-Estado. De hecho, precisamente comprende dentro
de sus límites (es difícil hablar de fronteras) imperios, ciudades-Estado, y
las emergentes <<naciones-Estado>>. Es un sistema
<<mundial>>, no porque incluya la totalidad del mundo, sino porque
es mayor que cualquier unidad política jurídicamente definida. Y es una
<<economía-mundo>>
debido a que el vínculo básico entre las partes del sistema es económico”. (1)
En ese sentido el orden social que nace, configura las otras las
dimensiones políticas, jurídicas y sociales, tanto que existe una dinámica
histórica dialéctica del cambio inevitable, en virtud que “las
estructuras económicas son los arrecifes de coral de las relaciones humanas,
que tienen una existencia estable durante un período relativamente largo de
tiempo. Pero las estructuras también nacen, se desarrollan y mueren” (2)
Los sistemas-mundo que mueren son aquellos que no pudieron asumir los
grandes cambios que ocasionó la
Revolución industrial, con el emplazamiento de una nueva
racionalidad económica, caracterizada por el nacimiento de la fábrica y la
salarización del trabajo, en un contexto de urbanización de la vida.
Este proceso disloco las viejas tradiciones comunitarias y colectivistas
de los sistemas-mundos que antecedieron a la formación histórico-social
capitalista.
La razón para justificar la totalización del orden social la toma de Marx
para quien “el dinero transformado en mercancía se apodera del alma humana
(practicas sociales) y la tiraniza como un demonio. El dinero es el que compra
a los hombres y el trabajo de éstos”. (3)
Marx, agrega “La fuerza-trabajo, productora de las mercancías, se cambia
y se compra como otra mercancía cualquiera y obedece a las mismas leyes del mercado,
olvidando que detrás de ellas hay un hombre, con su familia: el proletario.
Este proletario es libre, pero si no vende su trabajo se muere de hambre. Vende
su capacidad de trabajo, pero ésta es una cualidad personal, y no se puede
vender aisladamente; por esto una vez hecho el contrato entre capitalista y
trabajador, éste, con toda su personalidad y sus necesidades, pasa a manos del
otro” (4)
Venezuela en el contexto del sistema-mundo-capitalista se configura como
sociedad por la dialéctica histórica centro-periferia, pero esta dinámica se
desarrolla con mayor vigor por la presencia de la riqueza petrolera y la
prefiguración de un tipo de sociedad modelada desde las elites sintonizadas con
el proyecto modernizador del sistema-mundo-capitalista.
Por otro lado, se destaca que el nacimiento del sistema político
venezolano, que toma forma con el Estado liberal burgués, implica condiciones
necesarias para la formalización y legitimación de las relaciones sociales
capitalista, apoyada con los recursos provenientes de la actividad petrolera,
que dada el devenir de la economía se ha transformado en el potencial
energético del industrialismo capitalista.
Un teórico del orden capitalista como
Alvin Toffler explica el despliegue del capitalismo, este se produce a
partir de tres olas, que por razones de
tiempo y espacio se hará un viaje tangencial por la segunda ola, solo para
justificar la tesis que se mantiene en el trabajo.
Para Toffler, la sociedad ha transitado por una ola modernizadora del
industrialismo, que ubica entre los años 1650-1750, con la Revolución industrial.
La revolución no sólo ha mimetizado la forma de producir bienes, sino la
organización del mundo. El desarrollo de
tecnologías concretas en
gigantescas máquinas ha reemplazaron el trabajo manual, individualizando,
segmentando y especializando el trabajo en las fábricas, sobre la cual gravita
la vida urbana, “apareciendo una
<<cuña invisible>> en la sociedad, que la divide entre
productores y consumidores. Enormes factorías se dedican a fabricar bienes para
consumidores inconscientes de su mecanismo de obtención”. (5)
En ese sentido, el modo de producción capitalista impuesto y derramado
sobre las viejas estructuras económicas
se impusieron fuertemente a través de los modelos de desarrollo económicos que han prefigurado la sociedad en
el siglo pasado y el transcurre.
Un modelo de desarrollo económico hace referencia a un complejo proceso
teórico-practico cuya finalidad es organizar la actividad económica para darle
sentido de acuerdo a objetivos. Los
modelos económicos suelen dar explicación y sentido a la economía de un país en
los aspectos básicos:
Da cuenta la economía política, comprendida como aquel proceso
organizado por un gobierno para orientar la actividad económica, con la
finalidad de armonizar las
actividades las empresas y los actores la sociedad para
construir legitimidad y gobernabilidad
En relación a su naturaleza paradigmática, los modelos de desarrollo económicos pueden clasificarse en modelo de economía dirigido (el Estado interviene con la intención de
regular la actividad económica), el modelo neo liberal y el modelo mixto (que combina aspectos de la economía dirigida y elementos del mercado).
Para Brito García (1998),
Venezuela como formación socio-histórico en su desarrollo ha transitado
por los modelos económicos: económico agro exportado, modelo minero
primario exportado, modelo rentista/desarrollista, modelo económico neo – liberal y el modelo
mixto. (6)
El económico agro exportador, se establece con la conquista, la colonia española estaba
orientado a la satisfacción de los
requerimientos económicos de la metrópolis, las exportaciones de productos agrícolas,
facilitaron la consolidación del poderío
económico y político, además contribuyo a la formación social de la colonia,
privilegiando a las elites peninsulares.
Para 1917, el modelo económico se
fue transformando, dando inicio al modelo minero primario exportador, que
comienza a un proceso de adecuación a los recientes descubrimientos de
yacimientos petroleros en el territorio nacional. La dualidad económica de
Venezuela finalmente es resuelta hacia el modelo minero primario exportados en
los años de1920 y 1921, cuando se
produce la crisis de los precios del café, cacao, etc., afectando
singularmente los debilitados modelos
tradicionales existentes.
A esto se suma, la crisis de los años 1929, que afecto significativamente
a la economía venezolana, ya que la
depresión del dólar en los Estados Unidos de América, y la devaluación del dólar terminó deprimiendo los
mercados de la actividad agraria del país.
Finalmente, el modelo minero primario exportador, dado la demanda del
mercado mundial se oriento la
exportación de carbón, bauxita, cromo, asbesto y azufre entre otros, combinada
con la naciente exportación petrolera.
En este contexto dada la condición de rurralidad del país, el trabajador
asalariado se presenta como nichos incipientes en estructuras productivas
precapitalista, por tanto carecen de la fuerza y la organización suficiente
para conformar un basto movimiento que aglutine sus interese de clase
explotada. A esto se suma la gran represión realizada contra ellos por el
gobierno, bajo la consigna positivista “Orden y progreso”.
Estos modelos de desarrollo económico, permitieron darle orientación al
tipo de Estado necesario para fortalecer el proceso de acumulación del
capitalismo, de cara a una economía que dependía exclusivamente del la
actividad petrolera.
La institucionalidad surgidas de ellos,
facilitaron la edificación del anclaje
para darle orientación y ejecución a las políticas publicas de cara a al
tipo de sociedad que postulaban. Estas políticas públicas fueron utilizadas
para sentar las bases de las estructuras sociopolíticas, mediaciones y
lealtades, bases del consenso de convivencia. El naciente del Estado comienza a
jugar un papel fundamental en las dimisiones económicas, políticas, sociales y
culturales.
A partir de la década de los
cincuenta, se
institucionalizan en Venezuela, finalmente los modelos económicos que marcaran
la fisonomía de la sociedad moderna, estos modelos económicos estarán vinculado
al contexto internacional y el proceso de acumulación capitalista, los modelos
de aplicados fueron: el modelo económico
desarrollista basado en la sustitución importaciones, el neoliberal y el modelo de desarrollo económico de
orientación socialista.
4.2.- EL
DESARROLLISMO: PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES Y TRABAJADORAS EN LAS EMPRESAS
PÚBLICAS:
4.2.1.- 1958-1974: Modelo económico
sustitución de importaciones:
El modelo económico desarrollista, comienza aplicarse
tardíamente en Venezuela, con respecto a otros países como Argentina, Brasil o
Paraguay que tuvieron procesos de industrialización temprana. La razón que
explica ese rezago debe a que el mismo vino aparejado con el nacimiento de la
industria petrolera, base sustantiva del capitalismo venezolano y producto de
las restricciones comerciales impuesta por la Segunda Guerra Mundial.
El impulso del desarrollismo surge esfuerzo
de la CEPAL,
conocido en el campo intelectual como la teoría estructuralista. La cual señala que existe una lógica económica
caracterizada por una relación centro-periferia, en la cual se produce un
deterioro de los términos de intercambio que inevitablemente favorece a los
países centros y esto produce el subdesarrollo. (7)
Esta plantea que para
superar la relación de desigual centro-periferia se requería un proceso de
industrialización sustitutiva de importaciones deliberado y planificado desde
arriba para vencer los rezagos de las estructuras y las prácticas sociales
tradicionales que impedían el desarrollo.
Según Ground (1988): “Las
tres principales justificaciones para la industrialización sustitutiva se
plantearon en la primera formulación de la CEPAL,
fueron la restricción externa al crecimiento se atribuía a la caída de
la relación de precios del intercambio para los productos primarios y a las
barreras de acceso al mercado para las manufacturas, que necesitaban una fuente
interna de crecimiento. Segundo, se advirtió la necesidad social de aumentar
rápidamente el empleo para absorber la fuerza de trabajo creciente y ofrecer
mejores oportunidades a la fuerza de trabajo subempleada de la agricultura
campesina, lo que los sectores primarios de exportación no podían lograr.
Tercero, la industrialización bajo la dirección del Estado fue vista como la
única forma de generar rápidamente progreso tecnológico, porque los beneficios
de un aumento de la productividad en el sector primario de exportación serían
percibidos por los importadores y no por los exportadores. En términos
analíticos, este modelo era la consecuencia lógica de modificar tres supuestos
básicos del modelo neoclásico de comercio típico: que un país enfrenta una
demanda infinitamente elástica de sus exportaciones a un nivel de precios mundiales
dado; que hay pleno empleo y movilidad del capital y del trabajo; y que no hay
externalidades significativas provenientes de la inversión”. (8)
La teoría de la CEPAL demandaba la necesidad del papel protagónico
del Estado como promotor del desarrollo y del fomento de la industria para el
modelo de sustitución de importaciones. (9). El proceso de industrialización
tendrá dos momentos estelares.
El primero momento iniciado durante el
gobierno de Isaías Medina Angarita, quien
concentro su iniciativa en la necesidad de la intervención estatal, en la practica sus esfuerzos se orientaron a limitar las
importaciones y asignar cupos para acceder a los mercados internacionales,
apoyado por la renta petrolera producto de sus limitados actos sobre las empresas
transnacionales que operaban en el país en los negocios petroleros.
Un segundo momento, impulsado desde el trienio de
Acción democrática, donde el
esfuerzo se orienta a la promoción de una industrialización no petrolera, a pesar de que no se implementaron políticas
específicas para fomentar su desarrollo.
Desde el punto de vista de la actuación del Estado, comienza a
instrumentarse un importante viraje en la concepción del Estado, el Estado
liberal cuya finalidad era garantizar la paz social y darle garantía a las
inversiones del capital transnacional, va dando paso a un nuevo Estado con
mayor y mas amplias competencias.
Los primeros pasos dados se encuentran vinculado al tema de la
participación del Estado en representación de la sociedad sobre el tema de las
regalías petroleras y sobre el régimen de concepciones. Para ello se produce el
acuerdo del incremento de la participación del Estado en las regalías, concluyendo
con el llamado Fity-Fity, durante el gobierno de Medinas Angarita.
Con estos procesos socio-históricos va tomando cuerpo el Estado
interventor y proveedor de servicios. Para Off (1990) El Estado de bienestar
“organizado por los mecánicos de poder y coacción política y administrativa, se
interpreta como un grupo multifuncional y heterogéneo de instituciones
políticas administrativas, cuyo objetivo es manejar las estructuras de
socialización y la economía capitalista” (10)
Off profundiza el análisis, no solo reconoce el Estado en tanto
benefactor y proveedor de servicios sino
que le asigna la tarea de mediación ante las crisis, producto de los procesos
de socialización y la acumulación de
capital.
Pero él, Estado juega fundamental
para conjurar la crisis entre la socialización y el capital, necesita un espacio de conciliación de los intereses
de las clases en pugna.
Complementando esta perspectiva Poulantza
(1968), diría agregaría que el Estado es el espacio de conciliación de los intereses de de
clases, siendo sus instrumentos la política y lo político. Lo político remite
al campo de la superestructura jurídica-político del Estado, y el campo la
política es el escenario de la lucha de
clase. (11) Por tanto el Estado de bienestar también es el espacio para el
consenso y acuerdo de las clases con capacidad económica y de movilización social
en procura de sus demandas sectoriales.
El intervensionismo del estatal permitió la consolidación del Estado de
bienestar, una fenómeno que garantizo la orientación económica y sentó las
bases para la convivencia de las clases sociales, producto de la acumulación
capitalista apoyado con la renta petrolera.
4.2.2.- 1958-1975:
Las empresas públicas en el modelo de sustitución de importaciones.
En este contexto, las empresas públicas, extensión de los aparatos
del Estado, constituyeron un factor importante en la
construcción de las estructuras económicas y sociales necesarias para motorizar
el proceso de acumulación capitalista, ocupándose de áreas de la producción de
bienes y servicios que por su elevado grado de inversión y poca tasa de retorno no era
atractiva a la naciente burguesía nacional.
Según Balza Guanipa (2007) El primer paso de
constitución de empresas publicas en Venezuela, se concretaron con fundación de tres bancos públicos: Banco
Agrícola y Pecuario creado el 13 de
junio de 1928, el 30 de ese mismo mes
se crea el Banco Obrero adscrito Ministerio de Fomento cuya finalidad era proveer de viviendas a
los trabajadores con sede en Maracay, traslada en 1936 a Caracas y el
Banco Industrial de Venezuela creado en 1937 con el
objetivo de financiar e impulsar el desarrollo industrial del país. Es Eleazar
López Contreras quien se encargaría de la modernización de la banca con la
creación del Banco Central de Venezuela y una ley de bancos que logró la
creación de la superintendencia de Bancos
y el Consejo Bancario Nacional el 8 de septiembre de 1939 con la
finalidad de regular la circulación monetaria y el crédito para evitar
fluctuaciones de gran escala en el circulante. Además tendría como función
principal regular y vigilar el comercio de oro y divisas. El Banco Central de
Venezuela comienza sus actividades en 1940 y sus operaciones el 1 de enero de 1941” (12)
El retorno a la
democracia luego de una década de dictadura, se produce un replaneo del Estado
en la economía. Balza Guanipa (2007) agrega: “En los primeros años de la
democracia se tomaron importantes decisiones. Se anunció que no se renovarían
las concesiones petroleras, de modo que al vencerse retornarían al Estado, sin
que ello significara obligaciones para con las petroleras.
Se crearon la Corporación Venezolana
del Petróleo (CVP) y la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), la
primera para encargarse del negocio petrolero y la segunda para promover el
desarrollo industrial del sur del país, aprovechando las riquezas minerales de
la zona y su potencial hidroeléctrico. Se iniciaron inversiones públicas para
constituir la
Compañía Anónima de Administración y Fomento Eléctrico
(CADAFE) y la primera etapa de la represa del Guri. Se continuó el
procedimiento de compra de empresas telefónicas privadas iniciado en 1953, y
que concluyó en 1973, quedando la Compañía Anónima Nacional de Teléfonos de
Venezuela (CANTV) a cargo de la administración pública”. (13) Se afirma que en
este momento histórico comienza a tomar fuerza el proceso de nacimiento y
consolidación de las empresas públicas modernas venezolanas con la finalidad de
fortalecer el viraje y el rumbo tomado por
el proceso de acumulación capitalista.
Según Vitoria V,
(1982) El alcance de este plan de inversión a gran escala se puede visualizar
con la Cooperación
Venezolana de Guayana, realizado en la décadas de los
setenta: CVG- Electrificación del Caroní (1663)
Industria Venezolana del Aluminio, CA (Venelum/ 1973), Filsiven, Metalmeg,
la Financiera y Atlántica,
Fabrica Nacional de tractores y Motores. (14)
Como complemento En
1971 es creado el Instituto nacional de Canalizaciones con la finalidad de
encargarse de los dragados de los Terminales Petroleros en los Estados: Zulia,
Falcón, Monagas y Anzoátegui, orientado a construir una infraestructura para la
actividad petrolera.
La inversión en la
creación de Empresas publicas se planteo como objetivo fundamental un nuevo
modelo de acumulación capitalista distinto al agro primario exportador y el
minero primario, el nacimiento de una burguesía y a la capitalización del Estado para generar
un proceso re-distributivo de la renta petrolera.
Para Ochoa (1995) el
nacimiento y expansión de las empresas publicas venezolanas, sentaron las bases
para el proceso de acumulación capitalista moderno y radicalizado, ya que el
proceso fue orientado a la construcción de una panorama productivo y de
servicios necesarios para la institucionalización de del modo de producción
capitalista en su versión rentista petrolero. Se trata entonces de una estrategia
en marcha para capitalizar el sector privado, renuente a realizar inversiones
cuyas ganancias implicaban horizontes temporales de largo alcance. (15)
El proceso de
industrialización y el emergente nacimiento de las empresas públicas produjeron
un cambio sustantivo no solo en la economía, sino que remodifico la relación
capital-trabajo, potenciado por el nacimiento de un nuevo tipo de trabajador,
consolidado por la industrialización y la urbanización de la sociedad
venezolana. Condiciones necesarias para el sujeto asalariado o trabajador.
En este
contexto de nacimiento de las empresas publicas y se caracterizo por la
aplicación del modelo burocrático
populista en su primera fase, la participación de los trabajadores y
trabajadoras se realiza por mediación del movimiento sindical, para cual la
constitución de 1961 había abonado importante terreno garantizando la libertad
sindical.
Desde el punto de
vista de la lógica de la racionalidad de estas empresas publicas, se destaca
que su proceso de gobierno, dado que nacieron desde la iniciativa del Estado,
permitieron ir sentado las bases del modelo burocrático populista, que
reproducía el patrón de conciliación de intereses que ha gran escala caracterizaba el modelo de la democracia
representativa.
En ese sentido, acota
Pereira y otros (2008) citando a Ochoa (1996), que el modelo burocrático populista se caracteriza
por “denotar la conducción del aparato público basada en la colaboración de
clases a través del gasto público para el logro de los objetivos”. (16)
No
obstante, la mediación trabajador-empresas publicas se cristalizaba por la
mediación del movimiento sindical, que para este momento fue posicionado por
Acción democrática, dado las nefastas consecuencias dejadas por la experiencia
armada de la izquierda venezolana y el posterior proceso de represión
emprendido desde el Estado a la oposición de estos partidos.
4.2.3.- 1975-1979: El
<<boom >>petrolero. Empresas publicas:
El primer gobierno de Carlos Andrés Pérez, se
inaugura con una enorme ventaja económica.
Producto la Guerra de Yom Kipur, aunado al proceso de la
nacionalización del hierro el 1 de enero de 1975
y la posterior
nacionalización de la industria petrolera, el 1 de enero de 1976, el durante el
primer gobierno de Carlos Andrés Pérez, sumado la decisión de la OPEP, el 27 de septiembre, en Viena, la reunión de la OPEP, la cual resuelve un
aumento del 10% en los precios del petróleo y la congelación de los mismos por
9 meses, esta resolución, decisión que
contó con la decisiva intervención de Venezuela, panorama económico sufre un importante impulso por el
<<boom petrolero>>, con el cual llegaron al país una importante
cantidad de divisas que serian utilizadas para la radicalización del plan de
inversiones del gobierno nacional.
Ejemplo de esta iniciativa, producto de esta
coyuntura es diseñado y hecho público, el 9 de marzo
el V Plan de la Nación
y el 26 de agosto 11976, la Ley
de Crédito Público que le autoriza al Ejecutivo
nacional para contratar créditos por Bs.
31.000.000.000. Finalmente ese mismo año, el 23 de noviembre, se aprueba la Ley Orgánica de
Presupuesto para el año 1977 por un monto de Bs. 35.836.000.000. El 22 de
diciembre 1978, el Congreso Nacional
sanciona la Ley
de Presupuesto del año 1978 por un monto de Bs. 44.479.000.000.
Recursos necesarios para emprender la segunda fase
del proceso de industrialización, para ello el 22 de marzo de
1978, el Ejecutivo Nacional mediante decreto prohíbe la importación de 500
productos industriales y extienden las medidas proteccionistas como estaba
previsto en el Pacto de San José.
Estas inversiones según
Gumersindo Rodríguez (citado por Balza Guanipa), Ministro del primer gobierno
de Carlos Andrés Pérez, acotaba: al nacionalizar el hierro y el petróleo “no
sólo se aseguró mayor control de la sociedad sobre los beneficios del capital,
sino que permitió garantizar recursos financieros para ampliar la escala y
calidad del patrimonio público en las alturas dirigentes de la economía”. La
finalidad de esta política de inversión fue
dirigida a potenciar áreas como petróleo y gas, aluminio y acero, electricidad y
agua, petroquímica y cemento, transporte marítimo y aéreo.
El plan de inversión,
complemento el proyecto de la CVG,
para ello, fue creadas CVG- Ferrominera
del Orinoco (1 de enero de 1975), CVG-Siderúrgica del Orinoco (Sidor/1975),
Bauxita Venezolana, CA. (Bauxiven/1979), Interamericana de Alumina, CA
(Interalumina/1979).
4.2.4.- 1959-1979: un nuevo
sujeto histórico: participación de los trabajadores y trabajadoras en las
empresas publicas.
Brito García (1998) puntualiza: En el caso venezolano el nacimiento de los
trabajadores como clase social se encuentra estrechamente vinculado al rentismo
petrolero, del mismo modo que la conformación de la burguesía fue un proceso lento
y tardía, que necesito una fuerte alianza con las elites políticas que dirigían
el país.(17)
Este proceso tardío del nacimiento del trabajador y la trabajadora
moderna, según Koval (1985) obedeció al proceso de conversión que sucedido por
el proceso de acumulación capitalista por la presencia del petróleo, por la
poca herencia que dedo un modelo económico precapitalista y a la escasa
presencia del movimiento obrero internacional que ya había logrado establecer
importantes cuadros en otros países del continente” (18)
En ese sentido, la relación de los trabajadores con el Estado se
desarrolla en confrontación en procura
de la conquista de las reivindicaciones económicas y sociales, impulsada desde
la corriente de pensamiento socialdemócrata en su primera fase. Luego se
inaugura un proceso de cohabitación formalizada por parte de la CTV de las elites sindicales
con la tecnocracia políticas que dirigían el gobierno.
Este acuerdo de cohabitación y colaboración de clase, es concreto con el
pacto de Punto fijo, desplegado con los acuerdos posteriores con los
empresarios, la iglesia, el sector militar y los trabajadores.
Dado el sistema político, basado en una democracia representativa,
centrada en el reparto del poder entre los partidos políticos Acción democrática
y COPEI, para garantizar la convivencias se ejecuta la propuesta desde Washington,
se instrumentaliza la firma del Pacto de Punto Fijo, un acuerdo entre las
elites que se comprometían a no darle uso a su poder social de esos sectores de
la sociedad para debilitar la incipiente
democracia representativa.
A partir de allí, la política
pública de participación de los trabajadores se formaliza en la constitución de
1961 y la sucesiva tradición laboral venezolana. La forma que asume la
participación es a través de las asociaciones sindicales, que tomas el carácter
reivindicativo, y pulverizando la idea marxista de la conquista del poder
político, consigna primordial del movimiento sindical internacional.
Obedeciendo a esto, la constitución de 1961, le da rango jurídico a la
liberta de asociación sindical. La libertad sindical que legitima el derecho de
los trabajadores y empleadores a organizarse para la defensa y promoción de sus intereses
económicos y sociales.
Quintero (1970) indica que se
instaló una tradición jurídica laboral conservadora, que facilito el proceso de
acumulación capitalista. Esta tradición estable una bifurcación entre los
derechos individuales y los derechos colectivos (18).
En su planteamiento, expone que la tradición jurídica es profundamente
conservadora en tanto remunera al capital y no al trabajo, cuando los
trabajadores capitulan sin residencia cuando abandona la propiedad de esta
clase social sobre la plusvalía.
En Marx esta
categoría que refiere al valor, señala que el trabajo no pagado del
trabajador asalariado crea por encima del valor de su fuerza de trabajo,
el cual es apropia el capitalista. La plusvalía expresa la forma
capitalista de explotación, donde el plus-producto adquiere la forma de
plusvalía. Marx, luego de descubrir la esencia de la categoría económica de la
mercancía fuerza de trabajo, dio resolución a un problema que no pudo y no
quiso resolver la economía clásica. Este en su estudio del
capitalismo, indica que origen a la
plusvalía, da cuenta de la naturaleza de
la explotación capitalista, oculta/opaca tras la fetichización del trabajo como
mercancía. El modo de producción
capitalista, al organizar la producción, invierte una determinada suma de
dinero para adquirir medios de producción y para comprar fuerza de trabajo para
obtener un excedente de valor sobre la cantidad e dinero inicial anticipada,
cuyo resultado es obtener plusvalía. La
plusvalía se incrementa cuando se incorpora el factor tecnológico que aumenta
la productividad del trabajo e incremente la ganancia. (19)
Al respecto dice Boesrner (2007) se construyo
el marco político para un proceso de modernizaron en todas las esferas de la
vida política, económica, social y cultural. En el ámbito ideológico y
programático se impuso el discurso ideológico de Acción democrática, quien
mantuvo una actitud social-reformista. Esta actitud se ratifico con su
incorporaron a la Internacional
Socialista a finales de la década de los sesenta. (20)
Esta tradición social-reformista se ratifica
en las sucesivas leyes del trabajo en Venezuela a partir de 1946, en sus
sucesivas reformas. En esta tradición jurídica, la participación de los trabajadores
se encuentra modulado en dos aspectos:
Primero, la participación remite a la
posibilidad de asociación a los sindicatos, que constituye el mecanismo de
mediación entre esos y los patronos. Estos sindicatos funcionaba como extensión
d los partidos políticos.
Por otro lado, da cuenta del tema de la
representación, mediación que se lleva a cabo por una cúpula sindical que
gozaba de muchas prerrogativas, con marcados vínculos con los partidos
tradicionales y con los intereses de la burguesía nacional. El sindicato
reproduce el tipo de relación utilitaria que se produce a gran escala en el
sistema político de conciliación de intereses. No obstante a pesar de la lucha
de los trabajadores por su reivindicaciones, el tema de la participación de los
trabajadores en las empresas publicas se produce en un clima de colaboración de
clases, se concretiza con la Ley
de Representación de los trabajadores en los directorios de las empresas del
estado, los institutos autónomos y los organismos del desarrollo económico con
fecha 11 de julio de
1966, reformada el 23 de diciembre de
1969 y derogada en 1990.
En esta ley, según refiere Lucena (2010) la representación de los trabajadores
estuvo restringida a los directorios de las empresas del Estado, institutos autónomos
y organismos de desarrollo económico o social del sector público. “Se observa
la representación mayoritaria del ejecutivo, en algunos casos del Poder
Legislativo, también empresarios privados, de los usuarios, de las comunidades.
Se trata de una representación del colectivo laboral, con su diversidad de
categorías y calificaciones, pero en todo caso de asalariados al servicio de la
entidad pública correspondiente”. (21)
Lucena añade: “En la
primera etapa el liderazgo cúpulas del movimiento sindical brindó una suerte de
premio o reconocimiento a sus líderes y aliados, al nombrarlos para que
ejercieran la representación laboral. Se careció de un plan estratégico en el
cual se enmarcara el ejercicio de esta representación. Por otro lado al estar
desvinculado de las bases, tanto el nombramiento como su ejercicio, obviamente
no lo sintieron los trabajadores como una representación propia; se puede más
bien decir que contribuyó a la burocratización del sindicalismo en sus más
altas esferas”. (22) Las experiencias de
participación que destacan en el marco de esta ley se desarrollaron en las
Empresas de Guayana CADAFE y el Seguro
social.
Es fundamental que la
formulación y ejecución de las políticas publicar de participación de los
trabajadores y las trabajadoras, en
reste periodo se caracterizaron por ser de carácter asistencialista y
universalista, fundamento para la mediación del sistema de de conciliación de
los intereses de clase, y por cuanto el fundamento del modelo de sustitución de
importaciones a través de la industrialización observaba en las desigualdades
un factor de rezago estructural para el
desarrollo, meta fundamental del esfuerzo de la inversión.
Se afirma entonces,
el modelo burocrático populista al igual que para las políticas publica, los
aparatos del Estado en su organización y funcionamiento operaron bajo los
mismos fundamentos para garantizar la legitimidad y la gobernabilidad, apoyado
en la renta de la actividad petrolera que financiaba el gasto, como base de la
paz social
4.2.- 1979-1989: MODELO
NEOLIBERAL: PARTICIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES EN LAS EMPRESAS PÚBLICAS.
4.2.1.- Crisis del modelo desarrollista:
A finales de la
década de los setenta y principios de los ochenta, el modelo desarrollista
comienza a dar señales de agotamiento. La crisis fue potenciada desde la lógica
interna de la economía y por las características que estaba tomando el
sistema-mundo-capitalista
Para Molinas Duarte estas fallas serian: “ a) Las industrias que
nacieron bajo este proceso no contribuyeron significativamente a la
diversificación y aumento del ingreso de divisas, b) la falta de competitividad
externa no les permitía a las industrias locales que sus exportaciones ganaran
mercados externos; c) la política de proteccionismo industrial generó el
crecimiento de industrias manufactureras con altos costos de producción y baja
productividad; d) La ausencia de políticas que permitieran una mayor
integración entre las industrias estatales básicas no permitieron que nuevas
empresas pudieran desarrollarse utilizando los insumos nacionales (gas,
aluminio, energía, acero, etc.) para desarrollar industrias aguas abajo con
mayor valor agregado y capacidad de exportación” (23)
En la coyuntura internacional una multitud de factores
estructurales relacionados al comerció
exterior, cambios que en mayor o menor medida tributaron con la crisis del
desarrollismo en la región, Molina Duarte resalta los siguientes:“ 1) Un
crecimiento muy significativo del comercio de manufacturas en detrimento de los
productos básicos y las materias primas provenientes de los países en
desarrollo; 2) Las ventajas comparativas habían perdido posición en la economía
mundial como consecuencia de las innovaciones tecnológicas y el avance
científico, los cuales propiciaron el posicionamiento de las ventajas
competitivas basadas fundamentalmente en la calidad de la educación y la
gerencia; 3) La competitividad de la mayor parte de los países se centró en la
producción de bienes y servicios cuya demanda a nivel internacional era mas
dinámica y cuyos precios eran crecientes; 4) se acentuó la tendencia de las
políticas comerciales orientadas hacia una mayor liberación de los intercambios
comerciales y una apertura de las economías dando prioridad los procesos de
globalización e integración económica”. (24)
4.2.2.- Neoliberalismo en pañales:
La entrada del paradigma neoliberal en Venezuela, se produce con mucha
lentitud en su primera fase, si tomamos
como regencia a la Argentina y A Chile, se
puede apreciar en dos momentos: durante el gobierno de Luís Herrera Campins y
durante la presidencia de Jaime Lusinchi.
Durante el gobierno de Luís Herrara
Campins (1979-1984.), a pesar que unos años anteriores el precio del
petróleo logro alcanzar cifras jamás vista, en este lapso histórico la sociedad
venezolana moderna comienza a visualizar las aristas de una profunda crisis
sistémica. Esta crisis profunda es visualizada como una crisis del
endeudamiento externo, la cual ascendió a 25
millardos de dólares obligando al Banco Central
de Venezuela a declararse insolvente en febrero de 1983. En esta situación el
gobierno tomo la medida monetarista de
devaluar el bolívar frente al dólar.
Este hecho alcanza su condición de mayor significación con el Viernes
Negro,
punto de quiebre del viejo modelo desarrollista. El domingo 20 de febrero el
Presidente Luís Herrera Campíns promulga un decreto de suspensión de la venta
de divisa extranjera. Posteriormente los
días lunes 21 y martes 22, la medida fue
extendida hasta el día 25 de febrero; y el día 2. También por decreto presidencial, se establece un control
diferencial de cambio de 4,30 bolívares por dólar para los gastos corrientes,
envío a estudiantes del exterior, amortización de la deuda pública interna y la
privada externa y para las operaciones de la industria petrolera, del hierro y
otros renglones.
La crisis del endeudamiento externo irresuelta durante esos cinco años
de gobierno, desató la crisis económica y financiera más grave de la historia
reciente del país.
4.2.2.1.- Participación de los
trabajadores y trabajadoras en las empresas públicas/ gobierno de Luís Herrara
Campins:
Otro hecho primordial
para la participación de los trabajadores en las empresas publicas, lo
constituye la creación por parte de la
CTV de su Oficina de co-gestión, luego de llevarse a cabo
VIII Congreso en Porlamar en 1982. El balance de la concreción de esa resolución aprobada no paso de
ampliar la figura de los directores laborales, extendiéndola de un director a
dos directores, siendo este último electo por los trabajadores, en tanto el
primero nombrado por la
CTV. Ambos representarían al movimiento de los trabajadores
en el Directorio de las empresas. (25)
Esto nos permite a
arribar a una conclusión preliminar, la gestión de una política de
participación de los trabajadores en las
empresas publicas no fueron objeto de una política publica formal por parte del
Estado, las conquistas en esta materia respondieron a una matriz de convivencia
entre las elites para la estabilidad y la gobernabilidad del proyecto
modernizador de la democracia representativa
En ese coyuntura se
habla de una participación restringida y mediatizada por el modelo que Salamanca
(1997) denomina la modernización como programa político, cuyo rasgo fundamental es que
las iniciativas populares terminas difluyéndose en la racionalidad del Estado y
de los intereses de las elites que orientan las partidos políticos. (24)
Lo que permite afirmar, que a pesar del clima de movilización popular
los trabajadores no lograron niveles de participación en la gestión de las
empresas públicas, propuesta con cabida
en la concepción socialdemócrata del naciente sistema político venezolano.
La decisión de la CTV de alinearse con el
discurso de la cogestión, se encuentra en consonancia con el principio de
subsidiaridad de los postulados del partido demócrata-cristiano en el gobierno
para ese momento histórico, que el campo de la aplicación en la política social, tiene por objeto el
reparto y la limitación de las competencias para la ordenación de los grupos
sociales, según esta doctrina permite el ordenamiento de las relaciones de las sociedades intermedias.
Es fundamental
destacar, que a unos escasos días de finalizar el VIII Congreso en Porlamar, se hace pública crisis e intervención
del Banco de los Trabajadores (BTV), el 29 de noviembre de 1982, disipando la
confianza depositada en manos de la cúpula sindical.
El segundo momento de intento de institucionalización
del paradigma neoliberal se produce
durante el gobierno de Jaime Lusinchi (1984-1989.), en un contexto de duras críticas al desempeño del aparato del Estado,
centrando su atención en las empresas públicas. La estrategia del Gobierno de
Jaime Lusinchi, expresada en los Lineamientos generales del VII Plan de la Nación, se sustentaba sobre dos pilares: por un
lado, la conformación de un proyecto
político consensual llamado El Pacto Social y por el otro, la reestructuración
del Estado.
En materia de re-estructuración del Estado se planeaba la necesidad de
un proceso de transformación y
modernización del sector público para redefinir su papel en la actividad
económica. Allí se abría las puertas al proceso de privatización y la posibilidad de transferir al sector
privado un conjunto de actividades y servicios que estaban en manos del sector
publico.
El camino para la estrategia neoliberal, comienza a concretarse con la
creación de la COPRE,
creada el 17 de diciembre de 1984 el
presidente decretó, cuyo planteamiento final se formulo a través del proceso
descentralización y la privatización de las Empresas publicas deficitarias.
A partir de este momento histórico, el Fondo Monetario Internacional y
el Banco Mundial comienzan hacer un factor determinante en la dirección del
modelo económico de apertura neoliberal.
La presión de la COPRE,
con su propuesta de reestructuración del Estado, el proceso de
descentralizaciones de las competencia y la redefinición del gasto publico,
permitieron el proceso de de apertura a la teoría que sustentaría la Nueva Gestión Publica y la
noción de Gerencia publica, que luego trascurrido un tiempo se transformo en el
plus no solo de los académicos sino también de los actores políticos
fundamentales vinculados a la hegemonía de Acción democrática y COPEI.
Paralelamente, el modelo burocrático populista comienza a descuadernarse
dando paso a el modelo tecnocrático, que vino aparejado al proceso incipiente
proceso de privatizaciones figurado como una estrategia de corto plazo.
Este rumbo paradigmático neoliberal en su primera fase es lento, ya que
no gozaba con el consenso de las elites aferrada las prerrogativas del
desarrollismo. Es en este contexto donde se comienza a tomar cuerpo
privatizaciones, tras la dura criticas al desempeño institucional de las
empresas públicas.
4.2.3.- La segunda oleada neoliberal:
Segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez y Rafael Caldera.
4.2.3.1.-
consideraciones generales sobre el planteamiento neoliberal.
En el panorama internacional el neoliberalismo se perfilaba con el
consenso de Washington, que recoge las
líneas desarrolladas por John Williamson en noviembre de 1989, titulado <<Lo que Washington quiere decir
por política de reformas>> o <<Lo que desde Washington se entiende
por política de reformas>>, el cual contiene cuatro grandes puntos:
A grosso modo el consenso establece las siguientes líneas de acción.
Disciplina fiscal, “Los déficits presupuestarios deben ser
suficientemente pequeños para poder financiarse sin recurrir a la inflación;
prioridades del gasto público, que debería re-direccionarse desde las áreas
políticamente sensibles -que reciben más recursos donde su retorno puede
justificar, tales como administración, defensa, subsidios indiscriminados y
elefantes blancos- hacia campos desconsiderados y con gran retorno económico y
potencial de mejora de la distribución de la renta, tales como salud y
educación primaria e infraestructuras”.
Reforma fiscal, “Exige
ampliar la base fiscal y acortar las tasas impositivas marginales con la
intención de mejorar los incentivos y la equidad horizontal sin disminuir la
progresividad real. Mejorar la administración tributaria (incluida la
tributación de los intereses de los activos situados en el extranjero) es un
aspecto importante para ampliar la base tributaria en el contexto
latinoamericano”.
Liberalización financiera, “Aunque
el objetivo último es que el mercado determine la tasa de interés, como en
condiciones de extrema y crónica falta de confianza estas tasas pueden ser tan
altas que produzcan la insolvencia de las empresas y los gobiernos, el objetivo
intermedio sensato es la abolición de las tasas de interés preferencial para
los prestatarios privilegiados y el logro de una tasa de interés real
moderadamente positiva”.
Tasas de cambio, “Los países necesitan una tasa de cambio (al menos
para las transacciones comerciales) fijada a un nivel suficientemente
competitivo para inducir un crecimiento rápido de las exportaciones no
tradicionales y gestionadas de forma tal que se asegure a los exportadores que
su competitividad se mantendrá en el tiempo. Además, inversión extranjera
directa, la privatización de empresas estatales, etc.”.
4.2.3.2.- 1989-1993: Segundo Gobierno de Carlos Andrés
Pérez. Avanzada neoliberal:
Durante el segundo
gobierno de Carlos Andrés Pérez que la estrategia de desarrollo neoliberal se
hace publico, el país transita la segunda fase neoliberal, esta se tradujo en el contexto del país, como reducción del gasto publico,
una perdida de la responsabilidad social del Estado en materias esenciales de
salud, educación y de servicios, un proceso de privatización de las empresas
bajo0 control estatal, eliminación de la protección a la producción nacional y
la flexibilización de los mercados laborales.
La forma operativa de la estrategia se formaliza y se aplica a través
de:, la agenda Venezuela y el Gran
viraje.
El
paquete económico implicaba las siguientes medidas:
1.-
Someterse a un programa bajo supervisión del Fondo Monetario Internacional con
el fin de obtener aproximadamente 4500 millones de dólares en los 3 años
siguientes.
2.-
Liberación de las tasas de interés activas y pasivas en todo el sistema
financiero hasta un tope temporal fijado en alrededor del 30%.
3.-
Unificación cambiaria con la eliminación de la tasa de cambio preferencial.
4.-
Determinación de la tasa de cambio en el mercado libre de divisas y realización
de todas las transacciones con el exterior a la nueva tasa flotante.
5.-
Liberación de los precios de todos los productos a excepción de 18 renglones de
la cesta básica.
5.-
Anuncio del incremento no inmediato, sino gradual de las tarifas de servicios
públicos como teléfono, agua potable, electricidad y gas doméstico.
6.-
Aumento anual en el mercado nacional durante 3 años de los precios de productos
derivados del petróleo, con un primer aumento promedio del 100% en el precio de
la gasolina.
7.-
Aumento inicial de las tarifas del transporte público en un 30%.
8.-
Aumento de sueldos en la administración pública central entre el 5 y el 30% e
incremento del salario mínimo.
9.-
Eliminación progresiva de los aranceles a la importación.
10.-
Reducción del déficit fiscal a no más del 4% del producto territorial bruto.
11.-
Congelación de cargos en la administración pública.
Este
conjunto de medidas forman parte del
paquete estructural recesivo, cuya finalidad era un reacomodo del modelo
económico, una nueva forma de coordinación de Estado-sociedad y un proceso de
redefinición del sector publico.
Arrizabalo (1997) señala que un programa de ajuste
estructural recesivo es “es la condición impuesta por el FMI y/o el Banco
Mundial a un país para otorgarle respaldo financiero destinado a afrontar un
grave problema de pagos internacionales. Se trata de una receta única y de
pretendida validez universal que se aplica con independencia de la situación
particular de cada país. Y a ella se han sometido más de noventa países del Sur
y del Este durante las dos últimas décadas del siglo XX” (27)
Los programas de
ajuste estructurales surgieron a
comienzos de los años 1980s, como respuesta de las instituciones de
Bretton Woods a la crisis de la deuda
externa del Tercer Mundo, y luego se extendieron a los países del Este
tras la debacle de las economías del bloque soviético. Los programas de ajustes
estructurales recesivos, obedecen a una
concepción extremadamente ortodoxa de la política económica, que tarde sería bautizada por sus propios
impulsores como el consenso de
Washington, pretendiendo dar a entender su universal aceptación por
parte de los expertos en desarrollo económico.
Para teóricos
españoles los programas de ajuste recesivos actúan en dos lógicas:
Por un lado, la política de estabilización: “Intenta
corregir lo que se consideran excesivos déficit de los presupuestos públicos y
de la balanza de pagos, debidos a una demanda superior a la oferta del país. El
retorno al equilibrio, concepto básico de la ortodoxia económica, se conseguirá
mediante una política de reducción enérgica de la demanda, que ajuste el consumo interno del país a
su capacidad de producción. Esta intervención macroeconómica debe dar sus
frutos en el corto plazo (uno o dos años), utilizando instrumentos de política
monetaria y presupuestaria. Se trata en definitiva de un verdadero plan de
austeridad, de un ajuste recesivo, que conduce a una interrupción o incluso una
caída en el crecimiento del producto nacional”.
Por su parte, las políticas estructurales “buscan
adaptar las condiciones de la oferta de la economía, de manera que posibiliten
un crecimiento económico a medio o largo plazo. Dentro de la ortodoxia
neoliberal, la mejor forma de estimular el crecimiento de la producción interna
es favorecer el libre juego del mercado, permitiendo que la iniciativa privada
asigne los recursos donde encuentre mejores perspectivas de beneficio. Se
tratará, por tanto, de liberalizar la economía, abrirla al exterior y disminuir
la presencia del sector público”.
Plantea, que los
objetivos de los programas de ajustes neoliberales recesivos son: “conseguir
generar los excedentes en divisas necesarios para que el país pague el servicio
de su deuda externa. Para eso, la política de contracción de la demanda
contribuye a reducir las importaciones, y la reorientación de la producción
hacia la exportación posibilita la obtención de excedentes en la balanza
comercial. Y, además, todos los elementos des-reguladores facilitan el acceso al mercado de ese país por
parte de las empresas de los países desarrollados, bien sea mediante la
exportación de sus productos, bien sea mediante la inversión directa y
consiguiente instalación en el país, por la vía de las privatizaciones o al
margen de ella. Es decir, los programas de ajuste estructural favorecen los
intereses de las empresas multinacionales y bancos del Norte, lo que no debe
sorprender cuando se tienen cuenta quién controla las instituciones de Bretton
Woods”.
Las criticas
realizadas a los programas de ajuste estructurales recesivos viene de dos
direcciones por los efectos que producen sobre las economías en las que se
vienen aplicando. Hay un tipo de crítica radical que cuestiona su propia
existencia, negando a organismos externos legitimidad alguna para condicionar
la política económica de países soberanos. Otras críticas importantes a los programas de ajuste han
venido de instituciones internacionales como UNICEF o la OIT que, sin cuestionar la
necesidad de las reformas estructurales y que éstas requieren asistencia
técnica y financiera internacional, discrepan con el FMI y el Banco Mundial
sobre los objetivos prioritarios y los medios a utilizar.
En este orden de
ideas, es fundamental resaltar, el
documento de 1987 publicado por UNICEF
titulado "ajuste con rostro humano", cuya era finalidad era
promover un importante viraje en los programas de ajustes estructurales recesivos para proteger a los sectores mas
vulnerables del modelo económico neoliberal.
El estudio de UNICEF
señala que el ajuste estructural recesivo por si solo es incapaz de restablecer
el crecimiento, por tanto es esencial incorporar la dimensión humana (protección de los más débiles,
nutrición, salud) un principio estratégico del
ajuste. A demás ratifica que,
para su aplicación en Sur se impone impulsar cambios que orientados a mejor el nivel de vida, de inversión y de
protección de las necesidades humanas.
4.2.3.2.1- Participación
de los trabajadores y trabajadoras en las empresas públicas/Segundo gobierno de
Carlos Andrés Pérez:
En este contexto, el 20 de
diciembre de 1990 entra parcialmente en vigor la Ley Orgánica del
Trabajo (Gaceta Oficial No 4240), la
cual es reformada el 19 de junio de 1997.
En esta ley se
reafirma lo planteado en la constitución de 1961, de reconoce la libertad
sindical y se garantiza las condiciones para el funcionamiento del movimiento
sindical.
Es necesario
destacar, la mediación solo es posible por la vía de las organizaciones
sindicales, y las cúpulas de la CTV. En ese
sentido, dada el grado de avance del paradigma neoliberal la presencia sindical
como representación de los trabajadores y las trabajadoras comienzan a
retroceder dado el proceso de privatización.
4.2.3.3.- 1994 –1999: Paradigma neoliberal durante el
Segundo Gobierno de Rafael Caldera:
La segunda oleada
neoliberal, se profundizo durante el
segundo Gobierno de Rafael Caldera a partir de 1994, de la crisis bancaria
que afecto la economía venezolana. Su plan fue llamado <<La Agenda Venezuela>>,
consistió en la aplicación un conjunto
medidas económicas salidas de FMI, como requisito para que el gobierno de Caldera accediera
a préstamos internacionales.
Los objetivos de la
agenda fueron:
1.- Control del déficit fiscal. (Se ejecutó una
reforma tributaria para tal fin).
2.-
Liberación del precio de los carburantes, permitiendo un aumento de
hasta 800%.
3.-Liberación de las tarifas de los servicios públicos.
4.- Reducción de la tasa de inflación y
establecimiento del IVA, con excepción de alimentos, medicinas y libros.
5 Aumento de las
reservas internacionales (Privatización de empresas no prioritarias, tales como
hoteles y centrales azucareros).
6.- Liberación del
tipo de cambio, con la sub-secuente devaluación del bolívar.
7.- Apertura
petrolera (retorno a las asociaciones petroleras en el sector gasífero y
traspaso de actividades conexas al sector privado).
8.- Disminución de la deuda externa.
9.- Reforma del régimen de prestaciones sociales,
para establecer el pago anual de beneficios en lugar del pago al final de la
relación laboral (Creación de los sub-sistemas de prestaciones en vivienda y
turismo para los trabajadores).
10.- Creación de un
fondo para la protección de los usuarios del sistema bancario (FOGADE).
11.- Mayor eficacia
en la aplicación de los programas sociales (subsidios al transporte público y
familiar y el programa alimentario).
Estas medidas de
modernización y radicalización política realizo un gran impacto en las formas
de coordinación del Estado, la
orientación de las políticas publicas de corte universalista-asistencialita
propias del modelo económica desarrollista e inaugura una vertiginosa ola de
privatizaciones de las empresas publicas.
El modelo
desarrollista como momento de coordinación política, regula todos los aspectos
de la vida social, y mediante sus instituciones, es agotado por la crisis (en el caso venezolano por el peso de la deuda externa y la caída
del precio del petróleo en los mercados internacionales) y reemplazada por una
nueva forma de coordinación social mediante el mercado.
Parafraseando a Lechner (1997): En este tipo
de coordinación denota un orden
autoorganizado y autorregulado, el rol del Estado es debilitad y transformado
en el acelerador de la descentralización
y focalización de las políticas sociales. En este tipo de coordinación social,
se pretende eliminar todo tipo de <<interferencia política>>>
que distorsione las <<leyes del mercado>> como mecanismo automático
de equilibrio. (28) El debilitamiento de la coordinación política desde el
Estado se gesta desde el proceso de privatización de las empresas públicas,
reclamada para si por la burguesía nacional e internacional.
Con esta forma de
coordinación de la sociedad se radicaliza y profundiza de la Nueva Gestión
pública, la cual realiza una despiadada crítica al desempeño de las empresas
públicas, cuyo relato se centra en una
visión de la gestión de las administraciones públicas orientada hacia la eficacia,
la eficiencia y la satisfacción del ciudadano.
4.2.3.3.1- Privatización de las empresas
públicas/Segundo gobierno de Rafael Caldera:
El proceso de
privatización de las empresas públicas iniciado durante el gobierno de Carlos
Andrés Pérez toma nuevos bríos durante el Segundo gobierno de Rafael Caldera, en su política de reducción del
gasto, se planifico privatización de SIDOR y otras empresas básicas, aunque en la
práctica pudo sólo llevar adelante la venta de VENALUM, que fue adquirida por
el consorcio empresarial extranjero <<Amazonía>> En materia
petrolera se diseño la estrategia de las alianzas estratégicas y los convenios
operativos, con los cuales se pretendía aperturar las puertas de PDVSA al
capital internacional.
En el paquete de
privatizaciones se incluye: CANTV, la cual es privatizada en 1991, la concesión es otorgada al Consorcio VenWorld que
ofreció 1.885 millones de dólares por el 40% de las acciones de la empresa. Viasa la línea aérea bandera de
Venezuela es privatizada en 1991, la adquiere el grupo español Ibera, Banco
Provincial y la Sociedad Financiera
Provincial, quienes adquieren el 60 por ciento de las acciones por 145 millones
de dólares.
El 15 de septiembre
de 1998, se concretó la privatización del Sistema
Eléctrico del estado Nueva Esparta "SENECA" que alimenta a La Isla de Margarita, mientras
se esperaba la venta del Sistema Eléctrico de Monagas - Delta
Amacuro (SEMDA). El acueducto metropolitano de Caracas, de la liquidación de la empresa INOS (1991),
en 1992 se organiza un proceso de descentralización y privatización nacional de
los servicios, se utiliza financiamiento del Banco Mundial para la
rehabilitación del sistema, se organiza un proceso de licitación internacional
para la concesión del Acueducto Metropolitano, que fracasa al ser declarada
desierta. En 1993 se produce un proceso
de tercerización a través de la
contratación de pequeñas empresas para la operación del servicio: aducción,
tratamiento, distribución y
mantenimiento de redes.
El servicio de aseo urbano en el municipio Libertador: en 1981 son
firmados los contratos de servicios con compañías privadas. En 1984 se le entrega la concesión del
servicio al municipio y este constituye una mancomunidad con las empresas
privadas. Para el manejo de los rellenos sanitarios en 1998 se crea una mancomunidad sector
público y privado.
Otro caso lo constituye Aeropostal Venezolana, declarada en quiebra el 27 de
septiembre de 1994 a
pesar que estaba incluida desde 1990 dentro del cronograma de privatización
contenido en el programa de racionalización de los gastos del Estado
venezolano. Sin embargo, en tres oportunidades fue pospuesta la fecha de la venta de Aeropostal. El 20 de
mayo del 90, el FIV declaró desierta una subasta tras inhibirse los
inversionistas quienes alegaron, entre otras cosas, los onerosos contratos
colectivos y el exceso de personal. Finalmente, el gobierno la cerró y ofreció
en venta los activos, adquiridos por Nelson Ramiz, forma la firma Aeropostal Alas de Venezuela.
4.2.3.3.1.1.-
La privatización en el estado Zulia, sigue los mismos pasos que el resto del país, los ambulatorios dependiente (Sistema
Regional de Salud) de Ejecutivo Regional, fueron traspasados a micro-empresas
que se encargan de su funcionamiento y de la prestación del servicio.
En
el sistema de vialidad, se aplico la
creación de peajes en las principales carreteras, luego de licitaciones se
procedió a entregar su recaudación a empresas privadas. Los peajes fueron
establecidos en: Puente Rafael Urdaneta,
El Encanto, La Chinita, Virgen del
Rosario, Nuestra Señora del Carmen, San Rafael- Paraguachón y Puente sobre el río
Limón. Competencias que recupera el Gobierno Nacional, el decreto conjunto
entre el Ministerio de Infraestructura y el de Defensa donde se establece la
eliminación de cobro de 42 peajes en todo el territorio nacional, publicado en
Gaceta Oficial Nº 38.850.
Según
la Agencia
Bolivariana de Noticias: “En Venezuela, después del proceso
de descentralización neoliberal iniciado durante el 2° gobierno de Carlos Andrés
Pérez (1989-1993) varias gobernaciones del país construyeron una excesiva
estructura de estaciones de peajes, ya
que según la ley vigente era una de las pocas modalidades que les garantizaban
ingresos propios a las regiones fuera del situado constitucional.
Un
caso emblemático lo constituyo el proceso de privatización de Enerven, la cual
formaba parte de paquete de empresas publicas a privatizar con la política de
nacionalización del gasto, esta después de varios intentos fallidos durante los
gobiernos los segundos gobiernos de Carlos Andrés Pérez y Rafael Caldera,
siendo las empresas precalificada según la ley
de licitaciones fueron las
estadounidenses AES, PSEG, Reliant, CMS y Enron, la argentina Pérez Companc,
las españolas Unión Fenosa e Iberdrola. Suspendida
por disposición del gobierno Bolivariano en mayo de 2001, las razones expuestas
obedecía que era una empresa estratégica de servicio `publico y el tema de la
soberanía.
El
proceso de privatización en servicio de
recolección de basura municipal, entreverado y complicado, ya que esta
comprende una gran variedad de actividades, que dan desde la recolección, los
depósitos de los desechos, y la cobranza por los servicios. La municipalidad
oriento su estrategia a la asignación de concesiones, contratos a terceros y a
la mancomunidad. Este proceso se mantuvo el la gestión municipal de Jean Carlos
Di Martino y se mantiene en la actualidad.
La ruta
seguida de la privatización en las operaciones portuarias, se caracterizo por
una acelerada decisión, en el año 199 se procede a la
liquidación del Instituto Nacional de Puertos, ente autónomo creado en
año 1975 cuya finalidad era llevar la
administración del sistema portuario nacional. Este proceso se llevo a cabo
mediante resolución ministerial No. 319
del Ministerio de Transporte
y Comunicaciones (MTC), reformada por la No. 419, de fecha 1-10-91, la
cual facilitaba el traspasaba
actividades realizadas por el Estado al sector privado y se permitía la
conformación de empresas en la rama: Empresas
Operadoras Portuarias, Empresas Suministradoras de Recursos y Empresas de
Servicios Suplementarios.
Según Sabatino P, para
la adjudicación de las operaciones portuarias se procedió a clasificar los puertos
“tres generaciones muy bien definidas por las funciones que ellos cumplen en
cada caso. Así el puerto tradicional que sirve tan solo como punto de
transferencia de las mercancías de tierra al barco y viceversa, constituye un
puerto de la
Primera Generación, este es el típico puerto que todos
conocemos. El puerto de la Segunda Generación es uno en torno al cual se
desarrolla un área industrial que recibe la materia prima a través de aquél o
que produce los productos que habrán de ser exportados, tal es el caso del
complejo portuario industrial de Fos, en Francia. Un puerto de Tercera
Generación, en cambio, viene a ser un puerto que descansa sobre el mercadeo y
el intercambio electrónico de datos (EDI), y cuya misión es la de convertirse
en un centro logístico de distribución de cargas o una plataforma de exportación/importación”.
(29)
El
saldo en esta materia fue dramático, toda la infraestructura construida durante
el proceso de industrialización fue
desmantelada dejando al sector petrolero indefenso para la realización de sus
operaciones marítimas y comerciales.
En
ese sentido, a través de la ley sobre
Bienes y Servicios Conexos a las Actividades Primarias de Hidrocarburos
establece que las actividades primarias vinculadas a la explotación petrolera,
mediante la cual se re-nacionalizan los
puertos y muelles y colocados bajo la
administración de Pdvsa.
La lista
de privatizaciones es larga y trágica para la sociedad y la economía
venezolana, análisis posteriores han
develado el desfalco, la corrupción y la perdida de la soberanía. Es necesario
destacar que el proceso de privatización y desnacionalización de la economía
venezolana se caracterizo por una profunda crisis económica, política y social.
La historia esta dando cuenta de este fenómeno y se esta escribiendo, los datos
que salen a la luz publicas dan cuenta de una estrategia programada y
sistemática entre las elites políticas en el poder, el silencio complaciente de
las cúpulas sindicales, el sector privada arrodillado ante el capital
internacional.
En ese sentido, el
Estado de Bienestar es cuestionado, se dibuja una lógica de confiscación de la renta petrolera, se restringen el
ámbito de responsabilidad del Estado y
se replantea el esquema de lealtades políticas edificadas en el sistema
político de conciliación de los intereses de clases. En este momento de ruptura
paradigmática se produce el Caracazo, el 4 de Febrero y el 27 de Febrero, como
indicadores del descontento social.
El giro teórico-practico en las políticas públicas:
Nueva gestión pública y gerencia social:
4.2.3.3.2.-
Participación de los trabajadores y trabajadoras en
las empresas publicas/Segundo gobierno de Rafael Caldera:
En Este
contexto los escasos avances en materia de participación de los trabajadores y
trabajadoras en las empresas públicas
fueron olvidados como una estrategia de debilitamiento del movimiento sindical,
que mayoritariamente era coordinado desde las elites de Acción Democrática.
El cisma
de colaboración entre las elites sindicales, los operadores políticos del
neoliberalismo y el sector empresarial privado llega a su cisma en 1997, con la conformación, quines legitimaron y
legalizaron la reforma del régimen de
prestaciones sociales de los trabajadores. La labor de la comisión tripartita
quedó plasmada en un sistema de prestaciones sociales que preveía, su pago anual
y no al cese del desempeño laboral como se hacía anteriormente y se estableció cinco subsistemas de seguridad
social, que jamás se concretaron.
Pero un
logro importante en materia de participación de los trabajadores y la
trabajadoras en el gobierno de las empresas publicas lo constituye la
promulgación de Ley Orgánica de prevención del medio ambiente y las condiciones de
trabajo, materializada el año de 1989, el
cual permite la conformación de los Comité de Seguridad industrial por parte de
los trabajadores y trabajadoras para garantizar las condiciones materiales
seguras para realizar sus funciones.
Es ese
sentido se debe destacar, que los trabajadores y trabajadoras juegan un rol
fundamental, por cuanto, deben participar en la elaboración de los planes y
normativas de prevención, seguridad, seguimiento a las mismas y realizar las
notificaciones de la terminación de la relación de trabajo ante el organismo
competente (IVSS, Inpsasel).
El
delegado de prevención, es
representantes de los trabajadores, elegidos, en votación universal y secreta,
directas y libres para ejercer la vigilancia, control y evaluación de las
condiciones de seguridad y salud en el trabajo. Estos delegados gozan de
protección de la ley a través de la inamovilidad laboral y amplia competencia
frente el IVSS, Inpsasel.
A partir de este momento el movimiento sindical
reformista-socialdemócrata se desdibuja como orientador del los trabajadores,
sus cúpulas se deslegitiman y son cuestionadas desde el mismo campo laboral. Al
mismo tiempo que emergen de las periferias repuestas organizativas alternativas
como el Frente de los educadores Simón Rodríguez para mencionar solo una.
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nacionalizado el hierro, el 1 de enero de 1975, por el Presidente de la República; semanas
después, el día 21, estalló una huelga general de los trabajadores de la
industria del hierro nacionalizada.
.- Según palabras
de Marx: “el
concepto del trabajo productivo se restringe. La producción capitalista no es
ya producción de mercancías, sino que es, sustancialmente, producción de
plusvalía. E Marx, Carlos (1976).
Plusvalía absoluta y plusvalía relativa. Fragmentos de obras. El capital, lib. 1, sección 5,
Cáp. XIV. Editorial Progreso. Moscú.
.- Los Bancos afectados por esta crisis fueron: Banco Latino, Banco Progreso
(anteriormente
Banco Zulia), Banco Principal, (anteriormente Banco Principal
de los Llanos), Banco Italo Venezolano, Banco Profesional, Banco Amazonas (anteriormente Banco
Insular), Bancor, Banco Barinas, Banco La Guaira (anteriormente Banco
La Guaira
Internacional) Banco
de Maracaibo, Banco Metropolitano, Banco Construcción (anteriormente, Banco de la Construcción y de
Oriente), Sociedad Financiera
Fiveca, Sociedad Financiera Confinanza, Sociedad
Financiera Cremerca, Banco
Consolidado y Banco de Venezuela.