martes, 2 de agosto de 2011

Sociopolítica comunitaria y derecho a la salud en la revolucion bolivarian.


 Por: Janet Zumzteim Zimand.
El Socialismo del siglo XXI, el cual todavía está escribiéndose, es muy diferente al del siglo XX, al recuperar las ideas de Marx acerca de la nueva sociedad que queremos construir, y que debe ser responsabilidad de los pueblos y no del Estado, a través de una Revolución cuya meta es el pleno desarrollo de las potencialidades de cada persona; el pleno desarrollo humano1. Se le ha llamado socialismo comunitario, comunitarismo, sociedad del buen vivir, sociedad de la plenitud humana, con un horizonte anticapitalista, con la meta de lograr la satisfacción de las necesidades humanas y el respeto a la naturaleza.

Según el presidente Hugo Chávez, éste Socialismo debe ser bolivariano, cristiano, robinsoniano, indoamericano2, pero teniendo en común una profunda transformación económica que se base en la satisfacción de las necesidades humanas; una democracia participativa y protagónica en lo político; una ética socialista “basada en el amor, la solidaridad, la igualdad entre los hombres, las mujeres, entre todos”. Es decir, es un socialismo autóctono, original, y que debe adaptarse a la idiosincrasia de cada país, aprendiendo del socialismo de nuestros aborígenes. Sin embargo, no se puede hacer borrón y cuenta nueva, se deben ir produciendo las transformaciones de forma paulatina a través de los cambios en la Constitución y de la educación de la población orientada con este fin.

Pero, ¿cómo lograrlo lo más rápidamente posible? Impulsando la participación ciudadana, a través de la creación de los Consejos Comunales3 y las comunas, como célula básica de autogobierno, tal como se establece en el artículo 62 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en el que se asigna como “obligación del Estado y deber de la sociedad facilitar la generación de las condiciones más favorables para su práctica”4. Una de las principales funciones del Consejo Comunal es elaborar un plan único de trabajo con la finalidad de resolver los principales problemas de la comunidad, creando áreas de trabajo de acuerdo a las necesidades particulares de cada comunidad. Estas instituciones deben estar abiertas a todas las tendencias políticas, así, al luchar por resolver los problemas, y constatar el apoyo gubernamental, descubrirán el verdadero proyecto revolucionario bolivariano. 

Las líneas generales del Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2007-2013, se orienta a Venezuela hacia la construcción del Socialismo del soglo XXI, a través de las siguientes directrices:

la Nueva Etica Socialista, que propone la refundación de la Nación Venezolana, con sus raíces en los valores y principios de las corrientes humanistas del Socialismo y el pensamiento de Simón Bolívar; la Suprema Felicidad Social, a través de la construcción de una estructura social incluyente que persigue que todos vivamos en similares condiciones; la Democracia Protagónica y Revolucionaria, con la consolidación de la organización social y así transformar la debilidad individual en fuerza colectiva; el Modelo Productivo Socialista con la finalidad de lograr trabajo con significado eliminando la división social y la producción de riqueza subordinada a la reproducción del capital; la Nueva Geopolítica Nacional la modificación de la estructura socio-territorial de Venezuela para lograr la articulación interna del modelo productivo a través del desarrollo territorial desconcentrado5.

Venezuela como potencia energética mundial posibilita una estrategia que combina el uso del recurso con la integridad regional y mundial, que contribuirá con la construcción de la Nueva Geopolítica Mundial, que  implica la creación de un mundo bipolar a través del nacimiento de nuevos polos de poder que representen  el quiebre de la hegemonía unipolar, en la búsqueda de la justicia social, la solidaridad y las garantías de paz, profundizando el diálogo fraterno de los pueblos, su autodeterminación y el respeto de las libertades de pensamiento.

Entre las principales necesidades del ser humano se encuentra la de mantener la salud, que es deber y obligación del Estado proporcionarla a la población, y que es definida como la situación armónica de equilibrio dinámico (pues se modifica constantemente sin caer en el desequilibrio), e inestable (pues se suceden situaciones placenteras y displacenteras en las distintas áreas, que van cambiando aún en un mismo día) de las esferas física, mental, espiritual y social del ser humano. Quien posee y conserva ese equilibrio es un individuo sano, el que lo pierde, es un enfermo.

A través de la Misión Barrio Adentro el Estado está tratando de saldar la inmensa deuda social que en esta materia han tenido los gobiernos anteriores con la población, tomando en cuenta que aunque se habían creado ciertos recursos, no lograba llegar a todos los enfermos, sobre todo los más desposeídos, que no contaban con los recursos económicos para acudir a una consulta privada, o en todo caso aún acudiendo a un centro de atención pública, no tenían los recursos económicos para adquirir los medicamentos que se les habían indicado, y por lo tanto, no lograban un estado

satisfactorio de salud. Actualmente existen módulos de atención primaria en todos los barrios, en los que no sólo se presta atención médica gratuita, sino que también se le suministran la mayoría de los medicamentos que el paciente amerita. Desde la inclusión de los médicos venezolanos en la Misión, que en su totalidad han cursado o están cursando el Postgrado de Medicina Familiar (Medicina General Integral), ha mejorado sustancialmente la prestación del servicio de salud a las comunidades. La finalidad de todos éstos programas y misiones es la del “Buen Vivir” para todos.

Los pueblos indígenas originarios de nuestro continente están contribuyendo con sus conocimientos ancestrales al proceso de cambio que se está llevando a cabo en muchos países de nuestro continente, proponiendo un nuevo diseño institucional que reconozca la diversidad cultural y promueva la convivencia armónica entre todos los seres de la naturaleza, para así lograr el “paradigma comunitario de la cultura de la vida para vivir bien”, que significa “vida en plenitud”, sustentado en una forma de vivir reflejada en una práctica cotidiana de respeto, armonía y equilibrio con todo lo que existe, comprendiendo que en la vida todo está interconectado, es interdependiente y está interrelacionado. Existen muchas naciones y culturas en el Abya Yala (América), cada una de ellas con sus propias identidades, pero con una esencia común: el paradigma comunitario basado en la vida en armonía y el equilibrio con el entorno, que resume el objetivo de todo éste cambio que se está dando en nuestro continente.

“A un pueblo que marcha hacia su liberación, con dignidad y soberanía, expresando la voz del tiempo y de la Madre Tierra, nada puede detenerlo.”6


BIBLIOGRAFÍA

1.      Democracia, Participación y Socialismo en Venezuela: una mirada crítica. 2.010.
2.      Hugo Chávez Frías. Discurso de la Unidad, Caracas, 15 diciembre 2006. Edic. Socialismo del siglo XXI. Caracas, enero 2007, p.51.
3.      Harnecker, M. De los Consejos Comunales a las comunas. Socialismo del Siglo XXI. www.rebelion.org/docs/83276.pdf
4.      Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. 1.999. p. 10
5.      Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2007-2013. Caracas, 2007
Buen Vivir/Vivir Bien. Filosofía, políticas, estrategias y experiencias regionales andinas. Fernando Huanacuni Mamani. Perú, 2010. www.minkandina.org-

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Médico residente. Cursante de la especialización Hospital Coromoto-UBV. Este documento es el resultado de los debates realizados en la prosecución de la Unidad Curricular Dimensión Sociopolítica y derecho a la salud en Venezuela, impartida por el Profesor Oswaldo Garrido.

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